viernes, 6 de mayo de 2011

La fuerza del bloque

Los jugadores celebran el triunfo
tras el último partido en el CID. / cbgrancanaria.net
El Gran Canaria llega al play off en un momento extraodinariamente dulce. Diez victorias en los últimos once partidos así lo certifican. Y han sido triunfos de todo tipo, con unos partidos muy igualados, otros más holgados, remontadas, prórrogas, exhibiciones de Carroll o, como en el último ante el Power Electronics Valencia, exhibiciones colectivas.

Y es que si algo ha demostrado el Granca es su tremenda solidez como equipo. Se sobrepuso sin titubeos a la larga lesión de su buque insignia, Savané, y volvió a sorprender creciéndose ante la baja del base Taurean Green. Xavi Rey y Tomás Bellas han sacado lo mejor de sí para hacerlos olvidar y las incorporaciones, Borovnjak y Alvarado, tampoco han desentonado.

La cohesión y buen ambiente dentro del grupo es una de las claves. Ante el conjunto valenciano volvíamos a ver una estampa ya habitual en las últimas jornadas. Savané y Green, lesionados, participaban con sus compañeros en el calentamiento, estaban a su lado durante el partido y apoyaban en los tiempos muertos. Son detalles que ilustran ese compromiso.

Además, Pedro Martínez suma para la causa. El técnico catalán está dando lecciones de cómo gestionar una plantilla corta, manteniendo activas las rotaciones y sin que el equipo se resienta. En el último partido, volvió a dar mucha confianza a Óscar Alvarado, quien disfrutó de minutos importantes y empieza a sentirse integrante pleno de esta plantilla. Su progresión está siendo muy buena y eso va a ser muy importante de cara al play off.

En un partido en el que Carroll no brilló (pese a ser máximo anotador), todos aportaron cosas. Se quitaron de encima el cliché de la dependencia del americano, bien controlado por el rival, y crecieron a partir de la defensa. Jugadores como Wallace o Bramos volvieron a aparecer en los momentos clave y el equipo se dejó llevar por su afición hacia un triunfo emocionante.

Porque esa es otra. La afición del Centro Insular merece un comentario aparte. Con el play off ya en el bolsillo, un día laborable, volvieron a acudir al pabellón y a animar como nunca (o mejor dicho, como siempre). Durante el último cuarto, el CID fue una caldera a presión. Cook intentó calentar el partido en su pique con Bellas, pero el ambiente ya venía cargado desde la grada, que disfrutó tras el partido con las celebraciones de los suyos en su despedida de la liga regular.

Ahora, tras conquistar la quinta plaza, queda conservarla en casa del Granada, ya descendido. Y después, la fiesta, ya veremos contra quién. Hay quien quiere evitar al Real Madrid. Otros prefieren evitar al Valencia. Lo que está claro es que, tal y como está el Granca, seguro que son ellos los que quieren evitar pasar por el CID.

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